top of page
Arcón Cultural

Atril literario. Invitada: LORENA OTÁLVARO

Actualizado: 2 jun

MIS DESPOJOS

por JHON JAIRO SALINAS

Al llegar mi aliento final, cuando mi cuerpo se disuelva en cenizas, en cajita de sal humilde, guardad mi último secreto.


Sin flores ni artificios, sin ostentación que en vano me adorne, solo la muerte simple me acoje, en lecho donde el sueño eterno me arrulle.


Entre mis cenizas pecadoras, la pluma que fue mi voz y mi espada, testigo fiel de mis luchas y anhelos, grabad en tinta la historia de mi alma.


En el polvo celestial conservaré el refugio de mis defectos, guardaré el retrato de mi madre, faro que me guío en el viaje final hacia la serena eternidad.


Como epitafio, solo dejo palabras, grabadas en versos con simpleza pura.


Aquí yace un poeta iluso que amó y vivió, que luchó y soñó, que rio y lloró.


Mi legado es el eco existencial, un susurro en el viento que se extingue en el ocaso.


Que la sal arena me reciba con abrazo maternal, y mi espíritu se eleve libre y ligero,

hacia un nuevo amanecer donde la luz resplandecerá,

en un mundo sin ataduras ni dolor.


LA MOSCA

por ALEXÁNDER GRANADA RESTREPO, "MATU SALEM"


Lo conocí

en la cena

de un plato

de comida

putrefacta,

que había quedado

en la mesa,

el día después

del aniversario

de don Luis y de

doña Ramona.

Nos habíamos

hecho amigos

hacía tres horas,

cuando coincidimos

tomando las once

sobre el excremento

de Lucas,

el perro de

doña Sofía.

Joselo

-alias, Moscatell-,

era un mosquito

muy elegante,

nunca comía de más, y

siempre limpiaba

sus alas de ángel.

Tenía un

racimo de

ojos negros

que parecían

verlo todo.

hablamos

de vernos

en el cementerio,

en la segunda hora

del día,

cuando iniciaran

las exhumaciones.

Lo esperé

por más de

mil zumbidos de tiempo,

antes de empezar

a comer.

No llegó.

Cuando se llevaron

a Lucas,

tampoco pude

verlo;

y en la Plaza

del Mercado

nadie dio razón

de él.

No quisiera pensarlo,

pero, algo

me dice,

que Joselo

está muerto.


APARENTES

por YANINA CERIANI










Y sin razón aparente

sin miedo a la duda

del desvelo en aquella mañana

inesperada melancolía de una partida

se fue

sin razones

sin disculpas

así, levemente

sin excusas

y ahí, entre aparentes

me quedé esperando


POEMA V

por ALAN GONZÁLEZ SALAZAR



Sobre innumerables aceras 

se enfila la multitud 

se atropella con bolsas y paraguas 

y hay en su marcha regular 

un pulso de reloj de cuerda 

de retraso crepuscular a sus hogares

en los extramuros.


¿Por qué solo hasta ahora me resulta equívoco el destino de cada uno?


Siento el temblor de sus huesos como cristales que gritan en la noche cuando pasa el aire y los reclama y deja su música de fondo rodar en la consola de algún café barato.


DE TODOS Y DE NADIE

por HELENA RESTREPO

Si no me oyes,

si me oyes y no te mueves,

si mi voz revuelve tus entrañas

y sigues inmóvil,

si sabes que “deseo y quiero”

son palabras con las que te nombro

y no vienes a reclamar lo que es tuyo,

seré de la tierra más que nunca,

del cielo más que nunca,

cada vez más verde, más azul.


Muchos me han amado,

a muchos amé.


Solo de uno me siento parte.

Si no vienes, no será grave;

seré más verde, más cielo,

más agua, más lluvia, más fuego...


De todos y de nadie.


POEMA

por MARCOS ROGELIO RUBIO LÓPEZ (MÉXICO)




Enciende tu propia luz

brillando en tu propia vida,

y así brillarás en todos los corazones

y en todas las almas.


La Luz de Dios

nos vuelva la paz

y la calma.


SUSURRO EN LA DISTANCIA

por ESPERANZA RAMOS YÁÑEZ

Escolta mi vida

Como Júpiter escoltó la Luna llena,

Sedúceme de igual manera

Con tu luz, con tu energía,

En esa sincronía exacta y magnética

Conjúgate en la misma vibración

Y atráeme hacia ti,

Provoca un caos,

Provoca un cataclismo,

Provoca una alteración en el Universo

Como lo has provocado en mí…

Camina de mi mano

Libre por el universo

Y en esa hecatombe,

Y en esa alteración provocada…

Crea el Universo propio

De dos almas solitarias

Que se encontraron

De dos almas solitarias

Que en el universo se hallaron

Llena mis espacios

Suavemente…

Y atráeme a ti,

Sin más fuerza que el amor.

Llena mis días

Llena mis noches,

Llena cada segundo de ti,

Envuélveme en tu halo mágico

Y aférrame con fuerza a tu alma

Y procura no soltarme jamás…

Susúrrame como Júpiter a la Luna

Palabras melodiosas de amor

Deléitame en cada palabra

Y abre la galaxia del amor


Convierte el caos en un delirio

De placer indescifrable

Y altera gradualmente mi sentir.

Produce un apocalipsis constante

En cada parte de mi cuerpo,

En cada fibra de tanto sentir...


Alinea con tu experiencia

El fluir constante de tu amor y mi vivir...

Alinea con tu experiencia

Tu vida que va ligada eternamente a mí.


EL CRISTO QUEBRADO “Jotabemo espejo”

por GERARDO MARÍA GIRALDO PÉREZ

Tengo fraguado y triste el pensamiento

con cristo que refleja un sufrimiento.


De la pared cayó por el olvido

y con brutal estruendo se ha partido,

tiene de nuevo el corazón herido

porque para alzarlo, nadie ha venido.


Que ingratitud tenemos los humanos

ya te olvidamos porque estamos sanos.


Que mi Jotabé sirva como aliento

y dé consuelo al Cristo tan sufrido

al ver muchos cristianos tan lejanos.


Que olvidaron extenderle sus manos

para levantar su cuerpo tendido

que se encuentra abatido por el viento.


Señor, piedad de todos mis hermanos

que olvidan alabarte con sus manos.

Que no agradecen todo lo vivido

porque es usted, mi señor tan querido

que me protege cuando estoy dormido

ya que a tu corazón me tiene unido.


Este noble Jotabé te presento

para calmarte un poco el sufrimiento.


LA CASA DE LOS ESPEJOS

por DIANA MAR

Alborecer de la memoria son recuerdos petrificados

Por la salmuera años y días, el tiempo.

El vergel logos de mi luz, Es hierba seca.

Del álveo he heredado rosas y del ascendente las espinas.

Cianótica alma de silencio precipitado y carne

desnuda languideces bajo los astros,

cómo amarte miserable si eres ceniza y

pájaros negros en los ojos.

El deseo invisible agujerea la eternidad

pero estos huesos muertos,

me sigue creciendo el cabello y las uñas

 y mi nombre hueco no tiene sombra ni volumen.

Es la distancia medida del olvido

en la reverberación del espacio hace eones

cuando la partícula y materia,

Yo era dios

un dios infausto que incendia las hojas

que olvida el manifiesto de creación,

la invocación de la hecatombe.


POEMA

por LORENA OTÁLVARO

¿Y qué puede ofrecerte esta mujer?

Que colecciona miedos

Interpreta la soledad

Se hace cómplice del silencio

Posee el reloj sin horas

Se llena de vacío y

Acaricia el alma con los ojos

Se diluye en las sonrisas ajenas

Disfruta de los minutos lluviosos

Te hace preguntas obscuras

Hasta el punto de revolucionar tu diccionario

Te hace sonreír con migajas de alegría

Quizás es cierto que no encuentres nada más

Que una caricia donde su mano lleva el universo

Y un beso donde lleva el tono de la vida.



VIDEOS



PARTIDA de Indran Amirthanayagam

por VALENTINA ROJAS


DANZA DE MÁSCARAS

por HÉCTOR CARLOS REIS


INFAMIA (POEMA)

por CAROLINA HIDALGO


MUJERES NI UN PASO ATRÁS

por MERCEDES VIVAS BENÍTEZ



CUENTOS, ENSAYOS Y PROSA POÉTICA


UN INCÓMODO VOYERISTA

por UMBERTO SENEGAL


A la niña protagonista, Mona, de acuerdo con el funesto diagnóstico oftalmológico manteniéndonos en vilo a lo largo de la extensa novela, hasta el esplendoroso final en la ciudad de Aix-en-Provence donde se encuentra el Tríptico de las zarzas ardientes, de  Froment, le restan 52 semanas antes de perder por completo su visión. Henry, su abuelo, aprovechará entonces los miércoles de cada una de estas concluyentes semanas para que su nieta observe 52 obras maestras en los museos del Louvre, Orsay y Pompidou. Los recorrerán sin prisa. Mediante didácticas explicaciones e interpretaciones de Henry, la niña confrontará, observará y sentirá al máximo cada una de las obras que este elegirá para inspirarle sentimientos superiores. Que si la pierde, subsistan en su alma indelebles huellas de explícitas pinturas, esculturas y fotografías cuya evocación enaltezcan la vida que le resta, sin interés diferente al de nutrir sus miradas, su espíritu y memoria con la plural belleza de cuanto observan, dándole nuevas razones de ser a la existencia. No con el arte como sanación. No es terapia estética concebida por el abuelo. Es insondable experiencia de lo bello u horroroso induciendo a despertar valores espirituales: “Mona, cada semana veremos juntos una obra de arte, una sola nada más, del museo.  Esta gente que nos rodea querría tragárselo todo de una vez y se pierde por no saber administrar bien sus deseos. Nosotros seremos mucho más listos, mucho más razonables. Contemplaremos una sola obra primero en silencio, durante unos cuantos minutos y a continuación hablaremos de ella”, propone el abuelo a su nieta, cuando en el Museo Beaubourg dan comienzo al artístico ejercicio de paciencia, lentitud y recogimiento frente a un solo cuadro. Para el sensorial rito que llevarán a cabo, no son obligatorias muchas imágenes. Tampoco numerosas impresiones durante el lapso que discernirán frente a la obra elegida. Mucho menos, saturar el cerebro con heterogéneas imágenes plásticas y detalles de escuelas artísticas. No atiborrarse de apresurada belleza. Tampoco se escurrirán por entre las obras exhibidas, como deslizándose por una rampa de sensaciones y afectaciones propias de millares de visitantes deambulando veloces por recintos y pasillos, frente a obras de arte que no saben escuchar ni ver y  menos experimentar el tipo de sensaciones corporales e intelectuales que estimulan en el equilibrado observador. El compositor Ahmir Khalib Thompson, menciona el estado de paz que experimenta cuando mira sin prisa Hiroshima, pintura colmada de azules sobre azul, de Klein. Escucha el extendido sonido de una nota grave.  Para Isaac Kaplan, el tiempo promedio que alguien dedica a observar una obra en un museo es de 15 a 30 segundos. Insuficiente para experimentar en su totalidad la obra. “La gente puede visitar un museo y estar durante horas observando cientos de obras, y salir sin haber visto nada”. 


(Publicado originalmente en el portal LA CRÓNICA DEL QUINDÍO y

transcripto por expresa voluntad de su autor)


DESENTRAÑISMOS 127

por CARLOS ALBERTO AGUDELO ARCILA


1

¿Quién más inteligente que cada quien para decirle no al odio?

2

Olas en el río, las ilusiones.

3

Hoy y siempre el hechizo del mañana.

4

Toda pensar categórico respecto a Dios aliena, se torna en un enajenamiento abominable.

5

Lamentar un error y no corregirlo, es convertir el fango en hábitat de confort.

6

Si yo fuera caníbal la maldad no existiría.

7

La libertad definitiva se vive a través del vuelo, que le impulsemos a nuestra razón de vivir.

8

La palabra debe ir más allá de la palabra misma, está obligada a conjeturar su verbo eres, acumular experiencias hasta convertirse en verdad absoluta

9

Dios se ejerce, no se idealiza.

10

Execrable permanecer pendiente del defecto ajeno y no de los defectos personales.

11

Antes de escribir aforismos me armo con un arsenal de velas apagadas.

12

Soñar y soñar hasta cuando la pesadilla de la realidad nos haga sentar cabeza.

13

Es pecado mortal privarnos del placer que brinda el sexo.

14

El libro de las tragedias… es decir, el libro de la vida humana.

15

¿Cuál parte de la humanidad no ha decepcionado a otra parte de la humanidad?

16

En la etapa de enamoramiento, prevalece el amor al otro y no el amor propio.

17

La peor profesión sería la de ser Dios.

18

La superfluidad del lenguaje oral me impulsa a imaginar tapones de Odiseo en mis oídos.

19

A veces el silencio es vital, como si fuera algo de vida o muerte. O en ocasiones el habla se torna insoportable, se vuelve arma punzante contra la reflexión.

20

Quien escucha debe tener la capacidad de filtrar la fluidez del idiota.

21

Produce tristeza aquella persona que nunca llegará a valer una millonésima más que sus pertenencias.

22

Ese vacío en sí era el objeto hasta ahora jamás encontrado.

23

Esta vida es muy corta para no llegar a ser nadie.

24

Dios condensado en una fórmula matemática, difiere de cualquier concepción dogmática sobre su omnipotencia.

25

“Yo” sentado en la diestra de mí mismo, sicología concluyente del egoísta.

26

La ira de Jesucristo en el templo fue un acontecimiento tierno, en comparación con la furia del hombre perverso.

27

Un lector sin imaginación está condenado a ser un leedor mediocre.

28

El razonamiento de algunas personas cuando pretenden hablar con inteligencia, me conmueve al grado de irme volando hasta la casa vecina para entablar una conversación con el loro.

29

Se me acusa de no creer en Dios ¡Dios mío, pero si creo en el batracio y la humedad por donde se escabulle!

30

El microrrelato de un renglón en blanco narró de manera exacta, la existencia futura del niño por nacer.

31

Es mejor escribir mal que hacerlo bien a través del plagio.

32

La vida es río donde flotamos hacia el desagüe del tiempo.

33

Mirar con esperanza desde el fondo del abismo, el borde que propició la caída.

34

Con paso de cangrejo caminan mis ambiciones.

35

Soñar con un cóndor no quiere decir que en alguna ocasión vamos a volar alto.

36

Que yo no haya hecho nada en la vida me produce un gran alivio.

37

Por idiotas fanfarronean con dinero y en ocasiones con su intelectualidad.

38

Se es muy cínico al no reconocer nuestros errores.

39

Recordar tiempos tristes es recrear el futuro de manera desastrosa.

40

El incrédulo de Dios, capaz de vivir la existencia con amor, poetiza de forma admirable el ateísmo.

41

No es culpa de la horma donde calza el pensamiento mediocre.

42

Parece ser que Dios está en todas partes, menos en el corazón de innumerables creyentes.


(Publicado originalmente en el portal EL QUINDIANO

y reproducido por expresa voluntad del autor)

18 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page