¡Buenos días, mis queridos lectores!, hoy he venido con muchas ganas de compartir con ustedes varios de mis poemas, y por supuesto acompañados con mis obras pictóricas que son mi grata compañía a diario. Por fortuna hoy están allí del otro lado, pero muy cerquita mío, para que podamos juntos recorrer este camino de letras y pinturas.
¡Avanti!
“Diciembre”
Diciembre era el mes de las agallas,
de las cervezas “Bieckert” y las chombas “Fred Perry”.
De luna cortada y soles ardientes.
Diciembre
era el mes de sudor en el cuello
y agua de colonia pachuli,
de piletas anchas con olor a cloro,
de niños rosados y padres molestos.
Diciembre era la fachada de hombres engominados,
de los "Rolling Stones" y pantalones de goma
Era el mes del amor,
de la poesía con rock and roll
y Marlboro en la comisura.
Diciembre me recuerda a mis tíos,
de ellos heredé el humor y la sombrilla de sol.
A mi madre le salían sarpullidos
cuando venían mis amigos
a invadir la pileta,
sin previo aviso.
Antiparrras, zambullida de panza,
y anteojos de sol “ojos de gato”.
Diciembre
era el mes del auto descapotado
y melodías de Elvis Presley,
del tv en la vereda
y rodete espumoso.
El mes de la playa y el agua mansa.
De la pesca con anzuelo,
el café helado, y un libro de Walt Whitman.
De la llamada con cospel
a un amor bueno,
y de las viejas comulgando en la iglesia.
Diciembre
era el beso robado a la vecina del lazo azul
y la pantalla en blanco y negro.
El tiempo que arrasa y a algunos fastidia.
Es verdad que Diciembre me trae nostalgia,
mientras me recuesto en la cama,
en estas cuatro paredes desgastadas,
mirando la fotografía
de la infancia que no regresa;
de la lejanía,
porque el tiempo la ha tumbado;
pero acá en mi cuarto
es mi musa del niño que fuimos.
"Ese maldito pañuelo"
«En un beso casi desesperado,
desesperado por la inmediatez de los cuerpos,
me resisto a soltarte,
pero me irrita ese pañuelo que tapa tu boca ,
me desespera tomarte de la cintura
y no poder arrancar tu vestido.
Qué horrible que se siente desear
y no poder tener a la persona amada,
sentir la brusca necesidad de gritar desde el fondo del pecho,
y sin embargo esperar en silencio
mientras brota la sangre en el interior de uno.
Pero qué desesperado estoy por besar tu boca,
soltarte el cabello atado,
a no ser que dijeras que no quieres
y eso me destruiría por completo,
porque espere tantos años por esto,
a vos, mi querida, a vos,
que nunca comprendiste la razón de mi locura,
la influencia de mi amor por salvarte de la normalidad y el raciocinio. Pero en cambio ese pañuelo atado en tu cuello,
cubriendo parte de tu rostro,
la parte que me favorece y que me desquicia con desesperación,
y cuando lo veo quiero arrebatarlo
para poder tomarte entre mis brazos
rodeando tu cintura
y besarte en la boca hasta desaparecer.
Qué infeliz me siento por no poder tocarte,
pero más aún es el hecho de que no te des cuenta de cuánto te amo, aún en los momentos que sé que te he fallado
fingiendo no quererte,
o mintiéndole al tiempo de que un día estaremos juntos para siempre, sabiendo que eso no será posible
debido a mi falta de compromiso en los grandes momentos.
La imagen en mi cabeza da vueltas una y otra vez,
y aunque me perturba
debo reconocer que me mantiene en vigía
esperando el momento para hacerlo,
buscando la oportunidad de que por fin dejes de resistirte
y te ofrezcas, o me des una señal de arribo.
Pero en cambio te tapas con ese pañuelo
que al fin y al cabo es lo único que me frena
y me tiene sosegado
como un perro esperando a que su amo lo habilite».
Pinta y escribe: YANINA CERIANI*
*Nacida en la ciudad de Rosario en 1971, Yanina estuvo ligada al arte desde niña debido a las influencias de un tío abuelo, pintor reconocido de la ciudad de Rosario, Osvaldo Traficante y a su hijo quien también la apadrina, Marcelo Traficante.Yanina es autodidacta y ha dedicado su vida al arte en forma permanente.
Su capacidad de comunicación va pareja a la proyección y variedad de sus obras literarias como la poesía, el género de distopías, soliloquios, microficciones, etc.
Ha dado muestras de su versatilidad y su pasión por el arte desplegándola en varias expresiones artísticas como la pintura y la fotografía.
Actualmente dirige un taller literario para adultos llamado “Ronda de la palabra, los libros nos hacen libres” y difusión del arte por medio de programas radiales.
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