Por: ALEXÁNDER GRANADA RESTREPO, "MATU SALEM"*
El baile deportivo o profesional es un baile de pareja (hombre y mujer), codificado, que surge de la danza clásica (ballet clásico), cuya primera cadencia le fue otorgada por la respiración y los latidos del corazón. Así fue hasta la invención del metrónomo (1816). Su deslinde del ballet clásico ocurre en el siglo XVll durante el reinado de Lus XIV de Francia. Este grandioso rey no solo exaltó y estimuló el desarrollo de las artes, sino, que, a partir del ballet precursor de Balthazar de Beaujoyeulx funda en 1661 la “Academia Real de la Danza” para maestros, y en 1673, el compositor Jean Baptiste Lully, introduce en sus composiciones, el baile del minué, que era una danza campesina de cortejo, y la lleva a sus ballets y a sus óperas. El minué impresionó tanto al rey Luis XIV que se volvió el baile principal de la corte, y para distanciarlo de su relato bucólico, deciden exigir a las mujeres que lo bailen con zapatos de tacón y, a los hombres, que no lleven la rosa roja en la mano, sino en su boca, agarrada por el tallo. Este momento de esplendor de la danza se dio por la buena voluntad y gusto del rey, y por la afortunada coincidencia que traen los tiempos, de haber podido reunir en la corte del Palacio de Versalles, al gran compositor Italianofrancés Jean Baptiste Lully, al coreógrafo Pierre Beauchamps, al dramaturgo Molière, y poder contar con los textos del poeta francés Isaac Benserade quien proveía las letras de los ballets cortesanos. Fue hasta 1725 cuando Jean-Philippe Rameau perfecciona y escribe la técnica de esta danza que sobrevivió hasta el siglo XX. La necesidad del rey de llevar el baile de salón a sus memorables fiestas del Palacio de Versalles, hizo que la danza viviera un proceso rápido de profesionalización y que la técnica dancística fuera advertida como condición, para poder participar en los bailes de la corte.
Podríamos aventurarnos y decir, que la danza moderna, como representación artística no ritual, se desprende de la mímica corporal (Jean-Gaspard Deburau, precursor en Europa de la pantomima moderna), y esta, a su vez, se desprende como subgénero de la mímica dramática. Bien lo había relacionado Bastiano Di Rossi al definir el ballet como “una pantomima con música y danza”. La mímica dramática devela su rostro espiritual, debajo de su máscara, como una de las manifestaciones vitales más importantes del drama; siendo el drama, una de las tres enunciaciones más importantes de la literatura. Así pues, debemos entender la danza como una narrativa de carácter corporal, silenciosa, gestual, de movimiento ligado a la música, que alcanza un lenguaje particular con el que podemos contar, sin discurso, historias sencillas, emotivas, melancólicas, trascendentes, y sobre todo de sucesos inenarrables donde las palabras tengan alguna dificultad en la suficiencia o en la precisión para representar la idea de un pensamiento, como ocurre en la sátira, las hazañas militares, el enamoramiento, las despedidas y la comedia. Por provenir la danza del drama, contiene un componente teatral ineludible con el que logra comunicar correctamente toda la belleza de su narrativa. La parte teatral de la danza nos permite conocer, además, toda la dimensión de su figura estética; pues ella, por estar delimitada, se puede volver a ocultar de la luz, si invertimos el proceso y volvemos a literaturizar la narración dancística, llevándola a dormir de nuevo al texto. Aunque el baile deportivo solo fue reconocido como modalidad deportiva el 04 de mayo del 2006, y hace muy poco tiempo como deporte olímpico por el Comité Olímpico Internacional (COI), en los últimos cien años muchas cosas buenas han pasado.
PIONEROS: El inglés VERNÓN CASTLE (1887-1918) y su esposa Irene, con su baile, embellecieron y dieron nueva vida al baile moderno en el comienzo del siglo XX. Fueron ellos los que refinaron con su técnica y su elegante propuesta al Foxtrot. También debemos mencionar a la estadounidense ISADORA DUNCAN (1887-1927), bailarina y coreógrafa, como una de las precursoras de la danza moderna y como revolucionaria en el expresionismo que entregó su propuesta artística. VATSLAV NIJINSKY (1889- 1950): Bailarín y coreógrafo ruso, de origen polaco, uno de los más virtuosos alumnos de Pável Gert, el Premiere Danseur Noble del Ballet Imperial, quien de manera singular y profunda logró muchas caracterizaciones, que hicieron que ocupara un lugar destacado en la danza moderna, junto a su legendaria pareja Tamara Karsávina.
GEORGE BALANCHINE (1904-1983): Maestro de ballet y coreógrafo ruso, también alumno de Pável Gert, es considerado el fundador del estilo neoclásico. Su aporte importante en este asunto, es que Balanchine, apresura la llegada del ballet moderno, consiguiendo un desgarro estético del ballet clásico. El llamado Método Balanchine revolucionó el ballet estadounidense, como lo hizo Enrico Cecchetti en Inglaterra con su exquisita didáctica en la danza, a quien el ballet moderno debe parte de su gloria.
FRED ASTAIRE (1899-1987): Bailarín, coreógrafo y actor, es considerado el mejor bailarín de la historia. Esta afirmación está respaldada por el beneplácito de bailarines tan importantes como George Balanchine, Mijaíl Baryshnikov, reconocido como el mejor bailarín de ballet del mundo, y por su pareja rusa, la gran bailarina Irina Kolpakova. También compartieron esta opinión el sublime bailarín ruso Rudolp Nureyev (1938-1993), y su pareja en Londres, la inolvidable Margot Fonteyn (1919-1991), Primera Bailarina Absoluta del Royal Ballet; Maya Plisétskaya (1925-2015) quien también recibió el honor de ser declarada Prima Ballerina Assoluta del Ballet Ruso, y el mismo Gene Kelly, uno de los más grandes bailarines de Norteamérica. Fue en Fred Astaire donde Michael Jackson encontró la fuente más alta de su inspiración en el baile, pues sabemos, que muchas de sus propuestas en el baile-pop fueron evoluciones y adaptaciones de las figuras técnicas de Fred Astaire, como se evidencia en Smooth Criminal, donde Michael Jackson, literalmente, copia la propuesta cinematográfica y la intención dancística de Fred Astaire realizada en su película The Band Wagon (1953) donde aparece bailando con la bailarina y actriz Cyd Charisse. Esta huella de inspiración de Astaire en Jackson se puede reconocer también en Dangerous y en casi todas sus producciones musicales. He aquí que podemos diferenciar a Fred Astaire como un genio creador en la danza, y a Michael Jackson como un artista incomparable en su propuesta musical en el baile.
Las parejas de baile más importantes de Fred Astaire en el cine fueron: Rita Hayworth, Audrey Hepburn, Leslie Caron, Judy Garland, y la más importante Ginger Rogers, con quien rodó diez películas. Sin embargo, el baile de pareja perfecto de la historia lo consiguió Fred Astaire con Eleonor Powell en la película La nueva melodía de Broadway (1940), haciendo en su intervención conjunta, giros progresivos en simultánea con claqué; no hallándose en los movimientos ni en los golpes del claqué alguna discordancia con los tiempos de la música ni de la pareja.
WALTER LAIRD (1920-2002): Tres veces Campeón Mundial con Lorraine Reynolds (1962-1964) en Danza Latina Profesional. Este eminente bailarín y maestro entrenó a los bailarines de baile deportivo más importante de la segunda mitad del siglo XX, entre ellos: Allan Tornsberg y Vibeke Toft, Jukka Haapalainen y Sirpa Suutari, al magnífico Espen Salberg y al gran Donnie Burns. El tercer gran aporte de Laird al baile profesional se debe a la publicación de su obra: Técnica de Baile Latino, que mejora de forma evidente la fundamentación de esta práctica artística. DONNIE BURNS: Nació en Escocia en 1959. Es el bailarín de baile competitivo más importante hasta hoy. Especializado en Danza Latina, Burns ganó con su inigualable pareja Gaynor Fairweather catorce campeonatos mundiales latinos, y once veces ganaron el Campeonato de Danza Latinoamericana. En los veinte años continuos de competencia de Donnie Burns, nadie pudo ganarle. En la actualidad es el presidente del World Dance Council (WDC).
No puedo avanzar a la parte competitiva, sin antes mencionar a la bailarina más importante de Iberoamérica Alicia Alonso (1920-2019). Bailarina de origen cubano quien logró representaciones memorables en el Ballet con Giselle y Carmen, y la bella durmiente del bosque. Su partenaire principal fue el ruso Igor Yushkevich (1912-1994), con quien haría presentaciones inolvidables en los ballets rusos de Montecarlo en 1955, como estrella invitada. Fue la primera bailarina de América en bailar con el Bolshoi y el Kirov en los teatros de Moscú y San Petersburgo, consiguiendo los más sonoros y ovacionados aplausos.
En Colombia, a pesar de los buenos oficios de la Federación Colombiana de Baile Deportivo que dirige con dedicación Viviana Burbano Hernández, y que está representada por la World Dance Sport Federation (WDSF), aún no ha logrado el objetivo deportivo más esperado, que es, el conseguir que parejas de baile deportivo colombianas participen en las eliminatorias de los campeonatos mundiales de Bailes Latinos y Standard, como sí ocurre en la actualidad con la salsa Deportiva y con el Tango. Cierto es, que el proceso de formación es aún incipiente y necesita más tiempo de maduración, pues, en Colombia solo hasta el año 2005 fueron certificados (IDSF) los primeros entrenadores de baile deportivo, Carla Tibocha Ruíz (Ballet Miluzka) y Néstor Jiménez Ladino. Ambos entrenadores oriundos del Eje Cafetero Colombiano.
Para no desprendernos todavía de la danza clásica, deseo nombrar también dos de los intérpretes más importantes de Colombia: Luis Miguel Tibocha Ruíz (Ballet Miluzka) y Fernando Montaño. El maravilloso desempeño de Fernando Montaño en la danza clásica lo realiza especialmente en Europa, y la interpretación de su narrativa corporal tiene la singularidad de combinar con elegancia, la belleza depurada del movimiento europeo con la pasión, la fuerza y el calor de los aires africanos que se instalaron a vivir para siempre en su Buenaventura amada, y que Montaño carga orgulloso en su sangre.
El baile deportivo o competitivo está conformado por tres grupos de estilos rítmicos que permiten su expresión dancística y con los cuales se compite: Los Bailes Standard, los Bailes Latinos y la Salsa Deportiva.
BAILES STANDARD: Vals inglés, Tango europeo, Vals Vienés, Slow Fox y Quickstep. Combina los gestos técnicos que forman figuras rigurosas, con la sobriedad y la elegancia del Baile de Salón europeo.
BAILES LATINOS: Rumba, Cha Cha Chá, Jive, Pasodoble y Samba. Su rigidez solo descansa en sus figuras técnicas, pues, es una modalidad más abierta en la expresión dancística. Los bailes latinos acentúan la fuerza y el color que permiten sus ritmos, combinando el pensamiento y la emoción, para transmitir con el movimiento corporal y la música un sentimiento. Aquí, a diferencia de los Bailes Standard, el movimiento de las caderas es fundamental en la marcación narrativa; pero siempre en los límites que permita la elegancia. La acción y la reacción en los movimientos de la pareja son el antídoto a la monotonía. La monotonía no está permitida.
SALSA DEPORTIVA: Pachanga (ritmo cubano), Guaguancó (cubano), y Boogaloo (fusión del son montuno y la guajira cubana con el soul). La Salsa Deportiva como modalidad deportiva es de fecha reciente. Aunque la fuerza de sus movimientos y la expresividad de sus figuras técnicas rebasa a los Bailes Latinos y Standard, ha tenido muchas dificultades en lograr una estandarización de sus figuras técnicas, pues la sola variedad de nombres que adjudicaban sus promotores a las mismas figuras –por el sincretismo cultural-, impedía que se pudieran comparar y reconocer en un solo lenguaje a nivel mundial, para permitir que la competición tuviera un juzgamiento objetivo. En la modalidad deportiva de la salsa se aceptan acrobacias, pero en número limitadas; entendidas, como la elevación de la pareja, haciendo figuras sin contacto de los pies con el piso. Las llamadas cargadas deben ser elegantes, sin perder el contacto con la pareja, y con riesgos minimizados. Debe prevalecer en la interpretación, la belleza de la estética del movimiento sobre los atrevimientos artísticos que sean temerarios, y que son más populares en la Salsa Cabaret, por ejemplo.
Las competencias de Baile Deportivo están organizadas y reguladas por dos organismos administrativos a nivel mundial: La Federación Internacional de Baile Deportivo (WDSF), que regula el campo deportivo y que preside Lukas Hinder; y el Consejo Mundial de Baile (WDC), que regula el campo artístico-competitivo, y que preside Donnie Burns. Se compite en campeonatos mundiales, en Gran Slam, y en los World Games. En Inglaterra, la WDC organiza el evento más importante del Baile Latino: el Blackpool. Guardadas las proporciones, el Blackpool es el Super Bowl de las competiciones de Baile Deportivo.
ESTILO ARTÍSTICO: Podríamos reconocer, después del auge de la vida artística del gran bailarín Fred Astaire, un segundo periodo de oro del Baile Deportivo como disciplina deportiva y artística, que iría desde el día que ganaron el primer campeonato mundial Donnie Burns y Gaynor Fairweather (1984), hasta el año 2007 cuando ganaron el último campeonato mundial –y año de su retiro-, la pareja conformada por Bryan Watson (SUD) y Carmen Vincelj (GER). En este periodo conocimos parejas extraordinarias, que además de ganar muchos campeonatos mundiales, lograron en su interpretación dancística encontrar un estilo artístico exquisito y singular, que los convierte, a la vez, en referentes para los nuevos intérpretes. Son ellos: Donnie Burns y Gaynor Fairweather (GB), Allan Tornsberg y Vibeke Toft (DIN), Espen y Kirsten Salberg (NOR), Michael Malitowski (POL) y Joanna Leunis (BEL), Jukka Haapalainen y Sirpa Suutari (FIN), Bryan Watson y Carmen Vincelj, Slavik Kryklyvyy y Karina Smirnoff (UCR). La propuesta estética de estas parejas es inolvidable, pues en cada una de sus presentaciones, el espíritu de los espectadores fue exaltado, haciéndolos poner de pie y rindiéndoles aplausos interminables. Bryan Watson logró con dislocaciones y disociaciones corporales, una narrativa de tipo cursiva (digo yo), donde no se hallan tiempos muertos en la transición de las figuras técnicas. Duplicó la velocidad del movimiento de las manos sin perder la sutileza en la interpretación, consiguiendo con la precisión de los movimientos de Carmen, una permanente y especial armonía. Slavik Kryklyvyy y Karina Smirnoff nos dejaron leer en su narrativa corporal, los bellos estadios que vive el amor de pareja hasta llegar al éxtasis, mostrándonos el declive positivo que trae la paz que se logra en el encuentro de dos destinos. Sin embargo, la cima en el estilo artístico de este periodo, la alcanzaron Michael Malitowski y Joanna Leunis. Malitowski nos transmitió el drama crudo de la vivencia de la vida, y Joanna Leunis con una depurada caligrafía, casi oriental, nos dejó conocer la pureza y la elegancia que se puede alcanzar con esta danza, y que, a pesar de las vicisitudes, la vida siempre trae una esperanza y una alegría.
De los actuales competidores, ya podemos reconocer en algunas parejas la construcción de un estilo artístico:
Ricardo Cocchi (ITA) y Yulia Zagoruychenko (RUS), Dorin Frecautanu y Marina Sergeeva (MOL), Kirill Belorukov y Polina Teleshova (RUS), Andrea Ghigiarelli y Sara Andracchio (ITA), Maruis-Andrei Balan y Khrystyna Moshenska (GER), Armen Tsaturyan y Svetlana Gudyno, Nino Langella y Andra Vaidilate (ITA), y, Charles-Guillaume Schmitt y Elena Salikhova (FRA), entre otros. Podría afirmar que en el nivel técnico y deportivo Ricardo Cocchi y Yulia Zagoruychenko, los campeones mundiales de bailes latinos indiscutibles, se llevan todos los honores, igual que Armen Tsaturyan y Svetlana Gudyno. Ya en la manifestación del estilo artístico, que devela un espíritu bello y reconocible, lo podemos evidenciar más fácil en las parejas de Marius-Andrei Balan y Khrystyna Moshenska, y en Dorin Frecautanu y Marina Sergeeva; quien, para mi gusto, es Marina Sergeeva la bailarina de Baile Deportivo que mejor consigue con su cuerpo y con su buen espíritu, la narrativa de mayor comprensión y belleza, de las competidoras actuales. En los Bailes Standard es más difícil reconocer la llegada de un espíritu artístico, pues prevalece allí la búsqueda de la perfección en la interpretación, y esta se logra con un trabajo de disciplina interminable. Debo mencionar en los lugares más altos de la interpretación de Bailes Standard a la pareja conformada por Dmitry Zharkov y Olga Kulikova (RUS), como una pareja sobresaliente, depurada y sorprendente. En Colombia la Federación Colombiana De Baile Deportivo ha tenido mucho éxito con nuestros representantes en Salsa Deportiva, logrando medallas de oro con Jefferson Benjumea y Adriana Ávila, bicampeones mundiales del World Salsa Open 2015 y 2016 y subcampeones del World Latin Dance Cup en las Vegas (USA). En el año 2017 Stevens Rebolledo y Yinessa Ortega ganaron en Polonia en The World Games-2017 la medalla de oro.
En Pereira el Baile Deportivo apenas vive sus inicios. El interés en la danza por los jóvenes va en aumento y es así como la Secretaría de Cultura de Pereira ha llegado a una cobertura de cupos en la práctica de la danza que ronda los 750 estudiantes. Se conoce por las solicitudes recibidas y por las audiciones, que por lo menos 2000 jóvenes están en espera de ser admitidos. Esta cifra, sin contar con los participantes de todas las escuelas privadas de danza que hay en la ciudad y de las que deseo destacar al Ballet Miluzka y al Ballet de Ana María Mejía, que hacen un trabajo estupendo, inspirador y profesional. Otra de las fortalezas notorias que hay en Pereira para la práctica de esta disciplina, es que la Secretaría de Cultura de Pereira cuenta entre sus buenos instructores con Néstor Jiménez Ladino, quien además de Juez y entrenador de Baile Deportivo certificado, fue tres veces chairman de los campeonatos nacionales, delegado por la Federación Colombiana de Baile Deportivo y la WDSF.
Estoy seguro que el Alcalde de Pereira y su Secretaria de Cultura, Luz Stella Gil, reconocen la importancia de la danza en el desarrollo social, siendo una de las didácticas más importantes en el proceso de aprendizaje de niños y jóvenes, y como una de las herramientas antídoto para optimizar el buen uso del tiempo libre, y el alejamiento del consumo de estupefacientes. También para lograr la búsqueda de la profesionalización en quienes quieran vivir la danza como una profesión. Quiera Dios, que los coordinadores y los mandos medios delegados de la Alcaldía no entorpezcan esta bella labor y este momento propicio, pues, sabemos que los grandes propósitos del arte y del deporte se pierden por el desgaste de funcionarios anti-administradores (no facilitadores), que sobrecargan con informes inservibles y especializados a instructores y participantes, logrando con esto disminuir la potencia que está dispuesta en la juventud, y por ello, terminan haciendo mal uso de los recursos públicos por ineficacia e ineficiencia. Esta absurda y recurrente pretensión, solo logra el aumento de los archivos físicos y virtuales de las alcaldías y gobernaciones, pero de ninguna manera el logro de los buenos propósitos de la sociedad, y del mandatario electo, según los haya ofrecido en su plan de gobierno. Ánimo, pues, que nuestros jóvenes se interesen por la danza y el deporte, y practiquen sin descanso cada día, y que nuestros atletas de Baile Deportivo de Pereira y Risaralda sean los autores de la llegada de nuevas glorias.
*Filósofo, escritor y adm. financiero. Subdirector del suplemento ARCÓN LITERARIO del Diario EL POLITICÓN DE RISARALDA.. Contacto: lascaravanasdematusalem@hotmail.com